Gabriele Palmas

Enólogo sardo en Alghero

Cerdeña en la copa. Vinos finos, típicos e intensos. Vinificación en pureza.

Una hermosa bodega en espectaculares colinas verdes entre la ciudad medieval de Alghero, la joya de una de las más bellas costas del Mediterráneo Riviera del Coral, y el norte de la capital de Cerdeña antigua ciudad de Sassari, rodeado de viñedos, olivares, jardines de cítricos y la naturaleza mediterránea, la producción de deliciosos vinos de Cerdeña prima. Vinos de Alghero caracterizados por los sabores de la naturaleza mediterránea, el mar, el suelo local y el viento.

De su padre, un abogado de Sassari apasionado por la viticultura, heredó el viñedo «Arcone», plantado a principios de los setenta en la Nurra entre Sassari y Alghero, caracterizada por suelos arcillosos y rocosos. Así nació la primera bodega de Sassari, que hoy lleva el nombre de Gabriele Palmas.

La historia

La bodega «Gabriele Palmas» se fundó en 2001. El primer viñedo lo plantó su padre como hobby, a principios de los setenta. El abogado Palmas consiguió transmitir su pasión por el mundo del vino a su hijo Gabriele, que compartió con él el proyecto y creó la primera bodega en Sassari en 1996.
Con los vinos Arcone y Montepedrosu fueron apreciados por la crítica especializada y recibieron varios premios. Cuando falleció su padre, Gabriele se dedicó a la reestructuración de los viñedos junto con su esposa Simona. Disponiendo de una empresa de más de cincuenta hectáreas, identificaron zonas de colinas muy bien expuestas para la nueva planta y experimentaron con nuevas variedades, junto a las autóctonas Cannonau y Vermentino, cepas internacionales que les habían despertado mucha curiosidad.

La elección inicial fue vinificar los tipos únicos en pureza y con crianza exclusiva en acero.
El deseo de comunicar sencillez y reconocibilidad les sugirió estudiar una etiqueta con, en el anverso, sólo el nombre del productor y dos símbolos de territorialidad: la torre aragonesa (emblema de la ciudad de Sassari) y el botón sardo declinado en varios colores para diversificar el producto. En la contraetiqueta, el nombre de la vid.

Elaboramos nuestros vinos artesanalmente en el mismo lugar donde cultivamos las vides y llevamos nuestras vidas.

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El terruño

La planta actual de 8,5 hectáreas nació en 2008, aquí plantaron Vermentino y Cannonau, luego siendo un entusiasta de la viticultura Gabriele decidió plantar también Cabernet Sauvignon y Syrah. Los resultados son bastante positivos, han creado vinos que gustan mucho a la gente, son vinos limpios pero a la vez muy intensos. Todo esto está ligado al terruño, porque aquí tienen una situación climática favorable, hay mucha piedra, por lo tanto mucha mineralidad, la proximidad al mar de Alghero, y es una zona batida por el mistral. A día de hoy la empresa está creciendo, cuenta con unas nueve hectáreas de producción y otras cuatro de nueva planta.

La bodega está situada en el centro de la empresa y domina las colinas de viñedos, lo que permite vinificar inmediatamente las uvas vendimiadas a mano.

Filosofía

Botellas elegantes, con la estilizada joya sarda (sa buttonera), en los distintos colores que distinguen los tipos de vinos.

Gabriele heredó la pasión por la viticultura de su padre, Giuseppe Palmas, fundador de la empresa. Desde 2001 participa en toda la cadena de producción de sus fincas, donde vive con su familia. Simona acompaña a Gabriele en la vida familiar y profesional. Ambos participan en la continuidad de la empresa con la misma filosofía de respeto y valorización de los productos naturales. Gabriele y Simona se ocupan personalmente de toda la cadena de suministro, han hecho de su trabajo una elección de estilo de vida, viven en la bodega donde criaron a sus hijos, enseñándoles a apreciar la naturaleza y a respetar sus tiempos.

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